El Mundo entero ha experimentado una
serie de cambios vertiginosos, Estas mutaciones, han sido acompañados también
de cambios sociales. El delito por ser constituyente de lo social, también ha
asimilado estas vicisitudes; adaptándose, evolucionando, e incluso
perfeccionándose.
Algunas de éstas características las
llamamos delitos modernos (si cabe el calificativo), y abarcan todas sus
modalidades: Delitos, económicos, delitos electrónicos, alcanzando también a
los delitos comunes y con esa evolución aparecen como lógica consecuencia el principio
y crecimiento de nuevos “Modus Operandi”, surgiendo como contrapartida la “Doctrina
de Administración de Crisis”, las teorías sobre “Resolución Alternativa de
Conflictos” “Resolución de Crisis de Alto Riesgo” y otros impulsos doctrinarios
como es la “Negociación para la Liberación de Rehenes” que es a lo que pretendemos
referirnos brevemente sobre su concepción, apreciación y categóricamente a su
aplicación práctica.
En las últimas décadas Sudamérica ha
experimentado un crecimiento sistemático del Secuestro.
Argentina no estuvo ajena a estas tragedias que tomaron auge desde finales de
la década pasada.