Investigación Científica: El Problema de Investigación

¿Qué significa?

Una vez que se ha observado la realidad y se ha planteado un tema de investigación, el científico se formula una pregunta. Por lo tanto el planteamiento del problema es el fundamento (empírico o racional) de una pregunta de investigación y ésta a su vez de la hipótesis; de ahí su importancia.

¿Qué debe argumentar?

   Después que el investigador haya verificado que el suyo era un problema de investigación, la actividad siguiente del procedimiento investigativo es plantear y formular el mismo en términos científicos, donde lo más importante consiste en redactar una argumentación razonable por la cual el investigador llega a la conclusión que en la disciplina científica en la cual contextualiza su estudio, existe la necesidad de responder a su interrogante o a tal problema científico.

Efectivamente, la formulación correcta de un problema de investigación no consiste en demostrar que una situación es problemática como se piensa, sino que esta es la demostración o argumentación lógica de que existen razones necesarias y suficientes; de acuerdo al estado del conocimiento científico vigente en una disciplina; para considerar que aun se desconoce la respuesta a cierto interrogante.

Es decir, el investigador debe justificar que el suyo no era un problema de información, sino que es un problema de investigación. Si no hace esta argumentación cometería un error grosero, puesto que corre el riesgo de que su estudio no aporte nuevos conocimientos, ni llene un vacío en la estructura de la disciplina en la cual se plantea, así como tampoco resuelva una contradicción explicitada en el saber de la ciencia.

Por lo tanto un problema científico no es un problema en términos coloquiales como nosotros lo imaginamos; como algo que causa inconvenientes o supone una dificultad, una complicación o un conflicto; sino que se refiere a determinada necesidad de conocer más sobre algo o que en una porción del saber se ha planteado un dilema; en términos más estrictos, un problema de investigación contiene una incertidumbre.

La incertidumbre, desde el punto de vista epistemológico, se refiere a alguna anomalía en una rama del saber que surge de realidades observables y se aplica a las características de una entidad, a la descripción de un sujeto u objeto, las relaciones entre eventos o sus causas, a la predicción de eventos o simplemente a lo desconocido. La "Incertidumbre científica" implica que existen datos o información que aún es desconocida por la comunidad científica o que habiendo información sobre el fenómeno de interés la misma es incompleta o peor aún adolece de error o imperfección. 

Por lo tanto plantear un problema de investigación, no es encontrar una situación conflictiva o problemática, sino que es el argumento (basado en los antecedentes y lo que se sepa hasta el presente) de que existe un estado del conocimiento limitado donde es necesario: a) describir un estado existente, b) conocer presuntas relaciones desconocidas, c) estudiar causas inexploradas o d) predecir un resultado posible.

Esta etapa de la investigación consiste en un análisis crítico de un conjunto de hechos y conceptos con el objetivo de descubrir una laguna o inconsistencia en el cuerpo de conocimientos de la ciencia, ya sea por ignorancia, por falta de certeza o por necesidad de nuevo conocimiento; todo lo cual debe dar lugar a una interrogante llamada “pregunta de investigación”.

Sobre su forma, al exponer esquemáticamente el método científico, Bunge (1981) precisa que el planteamiento del problema implica:

a) Reconocimiento de los hechos: examen del grupo de hechos, clasificación preliminar y selección de los que probablemente sean relevantes en algún respecto.

b) Descubrimiento del problema: hallazgo de la laguna o de la incoherencia en el cuerpo del saber.

c) Formulación del problema: planteo de una pregunta que tiene probabilidad de ser la correcta; esto es, reducción del problema a su núcleo significativo, probablemente soluble y probablemente fructífero, con ayuda del conocimiento disponible.

Por tanto, para demostrar la existencia de cierta ausencia en los conocimientos, es necesario presentar los conocimientos teóricos y empíricos que existen sobre el tema, sumado a observaciones previamente realizadas de la realidad, elaborando el fundamento científico que explicite la carencia o limitación de la información acerca de los aspectos que se pretende investigar.

Para demostrar la existencia de inconsistencias teóricas o teórico-empíricas en relación al tema que se pretende investigar (planteamiento del problema), es necesario argumentar uno o más de estos aspectos:

a) Carencia de información (sobre características, relaciones o causas de un fenómeno),

b) Contradicción entre los planteamientos teóricos y la realidad observada,

c) Falta de validación científica de opiniones que se asumen como ciertas,

d) Ausencia o necesidad de una explicación racional de las causas de un fenómeno,

d) La posibilidad de probar nuevos argumentos alternativos o soluciones más eficientes,

e) La necesidad de realizar predicciones sobre un fenómeno futuro,

f) La posibilidad de encontrar pautas, fórmulas o protocolos que permitan predecir un fenómeno.

A partir de ello, surgirá con claridad el propósito de la investigación, que será responder a la pregunta formulada.

¿Cómo se formula la Pregunta de Investigación?

   Plantear un problema de investigación es el procedimiento de exponer con argumentos lógicos (es decir argumentos razonables y verdaderos) el fundamento que demuestre que en una determinada disciplina científica aún está pendiente de ser resuelto cierto tema, y por ende, que existe la necesidad de realizar una investigación al respecto. La pregunta inicial entonces debe ser planteada ahora como un verdadero problema de investigación, el cual se resuelve hallando respuesta a dicha pregunta.

Como he mencionado, esta etapa significa argumentar la pertinencia académica de formularse determinadas interrogantes respecto al tema elegido; es decir, demostrar, sustentándose en la información recogida por medio de las acciones previas (observación de la realidad y estado de la cuestión en términos de antecedentes científicos), la existencia de cierta ausencia de conocimiento o inconsistencias teóricas o teórico-empíricas en los conocimientos existentes por el momento respecto al tema de interés y plantear en una sola proposición la síntesis de esa interrogante.

La pregunta debe contener en su enunciado un cierto valor de probabilidad de encontrarse una respuesta científica concreta que interesa hallar a través de la investigación. En términos sencillos la pregunta no puede ser vaga o imposible de responder.

Desde el punto de vista formal la pregunta debe contener el propósito del investigador, la variable de estudio y la unidad de estudio.

Por último cada investigación lleva una y sólo una pregunta de investigación.

En conclusión, la formulación del problema consiste entonces en elaborar una argumentación razonable, en el contexto de los datos y teorías aceptadas por la comunidad científica de la especialidad y la realidad observada por el investigador, que explicite una ausencia en los conocimientos existentes respecto al tema elegido, una inconsistencia en la teoría o la probabilidad de demostrar nuevo conocimiento respecto al mismo. Argumentación que tiene como conclusión necesaria a la pregunta de investigación y a la cual se pretende hallar respuesta demostrando una hipótesis, que puede ser empírica o racional.

Si la pregunta de investigación no halla fundamento en el planteamiento del problema se cae todo, no tiene ningún sentido investigar.

Por último, el investigador debe considerar que la simple duda u opinión, no puede ser fundamento para un problema de investigación dado que la ciencia no es para curiosos, sino que responde a interrogantes científicos.


0 comentarios:

Publicar un comentario

Con la tecnología de Blogger.
 

archivos antiguos

Eres el visitante número